Hoy es el día de la madre y aunque haya gente que no le guste porque sea una fiesta destinada fundamentalmente a comprar compulsivamente cosas que las madres no necesitamos, a mí me gusta.
Me gustaba de niña, cuando en el colegio nos pasábamos días preparando los regalos más rocambolescos; y ahora como madre, me encanta recibirlos, porque por feos o inútiles que a veces resulten, están hecho con cariño y eso es lo que importa. En mi colección personal ya tengo el mítico collar de macarrones, una margarita colgante hecha de barro, un espejo que no refleja la imagen (pero tiene muchas flores en el mango, jeje), un delantal decorado con las manitas de mi peque, un marco de fotos con una foto adorable y que pone "eres la mejor mamá del mundo", y seguro que me dejo algo. Hoy espero ansiosa a ver qué me tienen preparado.
Pero como he puesto en el título, hoy es el día de las madres pero también de todas aquellas personas que sin haberte traído al mundo te han cuidado y querido como si lo hubieran hecho. Afortunadamente, además de mi madre, yo cuento con mi "madre putativa" (es mi apodo cariñoso y le encanta). Nos conocimos por casualidad en una habitación de hospital hace la friolera de 11 años y a pesar de que nos separan unos cientos de kilómetros, me quiere, me apoya y me acompaña en todos los momentos buenos y malos de mi vida. Así que hoy también es su día.
Por comercial que sea esta fecha, creo que hoy puede ser un buen día para recordar a nuestras madres y "derivadas" que las queremos y que les
agradecemos el trabajo silencioso tras nuestras espaldas.
¡¡¡FELICIDADES!!!
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