02 diciembre 2005

TEATRO, LORCA , ANFETAMINAS...¿ALGUIEN DA MÁS?


Durante los seis años que pasé en Pamplona "estudiando" la carrera de Medicina, tuve la oportunidad de hacer todas aquellas cosas que siempre había querido y que mis padres me habían vetado; de todas ellas, sin duda, con la que más me sentí realizada, fue el entrar en un grupo de teatro.
El teatro me ha fascinado desde siempre; soñaba con poder estar sobre un escenario, olvidarme de quién soy y convertirme en otra persona totalmente distinta, y por qué no decirlo,también ansiaba un apoteósico final en el que los aplausos me invadieran.
En el colegio hice alguna que otra obrilla, pero no siempre fueron muy bien acogidas, ya se sabe "las empollonas" nunca interesan demasiado y yo lo fui en mi época. La única vez que recuerdo haberme sentido orgullosa de mi papel, y ya no sólo por lo cómoda que me sentí intrerpretándolo sino también por la reacción de mis compañeros fue en BUP, cuando con mi queridísima amiga Rosa representamos una escena del Tenorio; ¡cómo distruté metiéndome en los hábitos de la inocente Doña Inés, mientras Brígida me "tentaba" con una misiva de mi Don Juan!
Es por eso que en cuanto pude me apunté a un taller de teatro. La oportunidad llegó en 4º de carrera; 3º había sido un año complicado y al empezar el nuevo curso necesitaba cambiar de aires , así que cuando Luisma me comentó que en Barañain (un pueblo de Navarra, y que nadie se sienta ofendido) iban a empezar un nuevo taller, me apunté sin dudarlo, y menos mal que lo hice, porque si no me habría perdido una de las experiencias más maravillosas de mi vida. Pero eso es otra historia que ya contaré otro día.
¿Entonces a qué viene este rollo? Para explicarlo, ¡allá va otro rollo! Hace unos días navegando por este recientemente descubierto mar de blogs, entré en uno , anfetaminas.net, se llamaba (bueno y se llama). Entré porque el nombre me llamó la atención pero cuando leí un poco sobre qué iba me di cuenta de que no era lo que me esperaba. Reconozco que no profundicé mucho, pero por lo que leí, el hilo conductor del blog es una ruptura amorosa no demasiado bien llevada, ya que el tono de la página (aunque ya digo que fue un vistazo algo superficial) es bastante pesimista. El caso es que al ojear el blog vi reflejada la Albuerita que se apuntó al taller de teatro hará unos 3 años. Ha llovido mucho desde entonces y aunque he rehecho completamente y mi vida junto a una persona muy especial y de la que me declaro enamorada hasta los huesos, esa página me trajo a la mente muchos recuerdos y uno de ellos fue la poesía de Lorca "SI MIS MANOS PUDIERAN DESHOJAR".

Yo pronuncio tu nombre
en las noches oscuras,
cuando vienen los astros
a beber en la luna
y duermen los ramajes
de las frondas ocultas.
Y yo me siento hueco
de pasión y de música.
Loco reloj que canta
muertas horas antiguas.

Yo pronuncio tu nombre,
en esta noche oscura,
y tu nombre me suena
más lejano que nunca.
Más lejano que todas las estrellas
y más doliente que la mansa lluvia.

¿Te querré como entonces
alguna vez? ¿Qué culpa
tiene mi corazón?
Si la niebla se esfuma,
¿qué otra pasión me espera?
¿Será tranquila y pura?
¡Si mis dedos pudieran
deshojar a la luna!

Bonita , ¿verdad? Esta extraordinaria poesía me tocó recitarla en las fiestas de Barañain, en la plaza del ayuntamiento, abarrotada de gente. Poco recuerdo de ese momento.Estaba tan nerviosa que prácticamente no era consciente de lo que hacía. Por suerte a la gente le gustó. Pero lo que sí recuerdo, y con una claridad pasmosa, son los ensayos, junto a mi querido profe Miguel,y me acuerdo, porque recitar esas palabras, sintiéndolas una a una, haciendo míos esos versos, cuando estaba aún destrozada por dentro, me hizo derramar muchas y muchas lágrimas. Hoy día ya no me provoca tal reacción, pero sí que siento cómo se me encoje el estómago y es que es impresionante lo que Lorca podía hacer con un puñado de palabras.

1 comentario:

Anónimo dijo...

No me extraña que se te encoja el estómago, la poesía es preciosa.